¿Como sostenemos económicamente nuestra comunidad?
Confiamos plenamente que Cristo quien es la cabeza de la Iglesia la cuida y sostiene.
Por lo tanto a través de cada una de las personas en las cuales El habita, la expresión de su solidario amor y apoyo permite en la generosidad que se produzca el sostén ordenado e integro de las finanzas de nuestra institución.
No hace falta condicionar ni manipular lo que debe nacer voluntariamente.
«DAR lo que hayamos decidido en nuestro corazón, con responsabilidad, compromiso y alegría.»
Primera Etapa
Cada semana cuando das tu ofrenda durante nuestro encuentro, somos las personas mas agradecidas contigo, eso nos ayuda a sostenernos.
Pero ademas queremos invitarte a que conozcas que sucede con tu ofrenda y con lo que vos das generosamente.
“Cada uno debe decidir en su corazón cuánto dar. Y no den de mala gana ni bajo presión, «porque Dios ama a la persona que da con alegría»”.
2° Corintios 9:7
Segunda Etapa
Dentro de nuestra comunidad hay personas que han experimentado el Gozo de la pertenencia, y así como cuidan su hogar familiar también lo hacen con esta gran familia, como una expansión de Casa.
Son personas que han decidido dar un monto determinado durante 6 meses para el sostén de la comunidad, no importa si es mucho o poco para nuestro ver es tu Generosidad voluntaria, responsable y sistemática.
¿Si te gustaría unirte habla con el equipo de finanzas de nuestra comunidad?
“Con mi ejemplo les he mostrado que es preciso trabajar duro para ayudar a los necesitados, recordando las palabras del Señor Jesús: “Hay más dicha en dar que en recibir.”
Hechos 20.35
Tercera Etapa
Cuando has comprendido la realidad de nuestra mayordomía de que en este mundo estamos solo para administrar lo que a DIOS le pertenece entonces confiamos en tu madurez, para invitarte a participar en los proyectos de crecimiento de nuestra familia.
Como en un hogar en todo buscamos ponernos de acuerdo.
Pero, ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que podamos darte estas ofrendas voluntarias? En verdad, tú eres el dueño de todo, y lo que te hemos dado, de ti lo hemos recibido.
1° Crónicas 29.14 (NVI)